El comienzo de año es un momento propicio para poner la intención adecuada. Las filosofías orientales proponen que la intención se oriente hacia el proceso, sin obsesionarse con los resultados. Aunque el éxito suele depender de la gestión del proceso acompañada de una dosis de mejor o peor suerte, considero que me ayuda buscar objetivos concretos. Por eso, aquí no voy a entrar en los propósitos del año que tenga cada cual, aunque es una buena idea, que yo pongo en práctica.
Empieza haciéndote esta pregunta ¿Cuáles son las 3-5 cosas que te gustaría vivir en 2025?. Cosas concretas, relevantes y que dependan principalmente de ti. Yo en mi caso lo escribo en un espejo en mi recibidor. Así los tengo presente siempre que salgo o entro en casa, para que no se me olviden.
Para facilitar el proceso sigo este planteamiento que tu también puedes usar:
1. Usa el poder de la intención, quédate con lo que tiene una poderosa.
Toma tus primeras ideas y antes de ponerlas en limpio, debes preguntarte: ¿Porque es importante conseguir eso? Te sorprenderá ver que quizás el “primer porque” no es suficiente y tienes que profundizar más. Este ejercicio lo hago con algunos equipos de organizaciones en mis talleres de gestión del cambio y bajamos hasta el “quinto porque”. Si la intención está firmemente sustentada en un porque profundo, personal, elaborado, la fuerza del cambio es mucho mayor.
Por ejemplo, tomemos una persona que quiere adelgazar, la motivación estética para mi es diferente que la motivación de salud, o la de mejorar su auto-estima, o la de ponerte en forma para poder hacer una actividad deportiva con tus amistades. Piensa que motivación es la más poderosa de todas y como puedes abordar el tema usando la intención que te de la mayor motivación.
2. Usa el poder de la emoción. Si no te emociona, olvídalo.
Otro recurso para mejorar las posibilidades de éxito en aquello que te propongas para 2025 es activar la emoción. Una parte ya la estás haciendo con el ejercicio anterior, solo imaginando eso que deseas, ya empiezas a sentir la emoción de conseguirlo y ello crea un condicionamiento favorable, que te orienta en ese sentido. Las neurociencias nos dicen que si no hay emoción no hay recuerdo, por ello activar tu emoción hará que recuerdes el valor de tu propósito y te enfoques mejor en ese camino.
Como dar potencia a tus intenciones
3. Usa el poder de la atención y el cuidado, te facilitará el trabajo.
Una vez fijados tus propósitos, con sus porques y con sus emociones asociadas, empieza tu trabajo. Cambiar hábitos es laborioso, no lo olvides. Aquí hay que tener disciplina y paciencia. Ten en cuenta que opera el azar y que no todo sale como esperabas. Escuché hace poco una charla de un famoso gurú de meditación, que juega al golf, explicando el misticismo desde ese deporte. Decía que puedes dar una bola perfecta, pero que al caer, la bola bote en una tapa de riego y salga del campo. Igualmente, puedes dar un golpe mediocre que vaya contra un árbol, pero el rebote te coloque la bola junto al hoyo.
El azar existe, por eso necesitas paciencia, pero durante la vida se va equilibrando. Todo practicante de un deporte sabe que su tarea es buscar la excelencia, y evitar caer en la ansiedad del resultado. De la misma forma, en la vida esfuérzate en poner toda tu atención y tu cariño en lo que hagas, confiando que el azar se ira estabilizando con el tiempo, a tu favor.
4. Pero sobre todo cuida tu bienestar porque tomarás mejores decisiones
En diciembre se publicó un artículo en El País donde algunos abogábamos por el Mindfulness para evitar la confrontación política. Mis aportaciones estaban centradas en que si estás enemistado ni puedes dialogar para entender lo que ocurre, ni puedes tomar buenas decisiones. La vida no es mejor si una persona esta constantemente cultivando sentimientos de irritación o indignación ante lo que ocurre. La vida, como se explica en la biología, necesita del equilibrio y del bienestar para florecer. Se llama homeostasis. Por ello una de las tendencias para 2025 es cultivar el bienestar (por tu cuenta, sin esperar que sean los otros los que te lo proporcionen).
En este sentido nuestros cursos MBSR de reducción de estrés con Mindfulness son un referente, con evidencias científicas, para aprender a vivir tu vida desde la tranquilidad.
Si ya has hecho y te gustó en curso MBSR y estás en Barcelona tenemos un curso presencial especial, que daré yo mismo, para cultivar Las 4 disciplinas del bienestar duradero. Es un curso especial que hacemos solo una vez al año.
Espero que estas ideas te resuenen y sean inspiradoras para hacer del 2025 ¡un año memorable!
Dr. Andrés Martín-Asuero
Instituto Esmindfulness
Barcelona